Receta y beneficios de la compota de manzana

PorMar Calvo

16 Abr, 2018 - 8:00

Si te aburre comer siempre la misma fruta, puedes variar un poco y prepararla en compota. En este artículo anterior te dábamos la receta para una riquísima compota de frutos rojos. Hoy prepararemos algo más tradicional: compota de manzana.

Aparte de ser barata, estar muy rica y ser tan digestiva que incluso pueden comerla los bebés y las personas mayores, tiene un montón de propiedades.

Probablemente la compota de manzana sea el postre más sano que hay. Al contrario que otras frutas, que pueden dificultar la digestión y provocar gases, la manzana se considera una fruta neutra (al igual que la pera). Los nutricionistas recomiendan tomar al menos una pieza al día para mantenerse sanos.

Beneficios de la compota de manzana

Hay un refrán anglosajón que dice: ‘an apple a day keeps the doctor away’, lo que viene a decir algo así como “una manzana al día, mantiene al médico lejos”. Recuerda que las manzanas tienen un montón de beneficios para tu salud:

• Son ricas en antioxidantes.
• Son depurativas.
• Contienen fibra.
• Alcalinizan el organismo.
• Mejoran la salud de dientes y encías.
• Reducen los niveles de colesterol y la presión arterial.
• Su alto contenido en flavonoides tiene propiedades anticancerígenas.
• Regulan los niveles de azúcar en sangre, por lo que reducen el riesgo de padecer diabetes tipo 2.
• Aumentan la densidad ósea.
• Ayudan a mejorar los problemas digestivos.

Receta de compota de manzana

La compota de manzana es muy fácil de preparar. Una vez sepas cómo elaborarla, puedes jugar con otros ingredientes, servirla como postre, utilizarla para rellenar una tarta o incluso como salsa para acompañar carnes. En este último caso te recomendamos que apenas eches azúcar.

En principio la compota de manzana no necesita más que la fruta, agua, azúcar y canela. Pero esta vez vamos a preparar una algo diferente. Para 6 personas necesitarás:

– Ingredientes –

• 1 y 1/2 kg de manzanas Golden
• 400 ml de agua
• 120 g de azúcar (puedes sustituirla por edulcorante)
• Un chorrito de zumo de limón
• La piel de una naranja
• Canela molida

– Elaboración –

¿Ya lo tienes todo? Pues ya solo te queda seguir estos pasos:

1. Lava, pela, quita el corazón y trocea las manzanas. La piel resérvala, pues la necesitarás más adelante.

2. Echa agua en una cacerola y le añades el azúcar o edulcorante, un chorrito de zumo de limón y la piel de la naranja (procura quitarle la parte blanca que queda dentro).

3. Pon a calentar a fuego medio y lleva a ebullición, removiendo de vez en cuando para que el azúcar se disuelva. Deja cocer un par de minutos, lo suficiente para que se cree un almíbar ligero.

4. En ese momento incorpora las manzanas y echa canela en polvo al gusto (si lo prefieres, pues utilizar canela en rama). Remueve y agrega un poco de la piel de la manzana que tenías reservada (servirá como espesante natural).

5. Tapa la cacerola y cocina a fuego medio durante unos 30 minutos, o hasta que veas que la manzana ha adquirido un tono dorado y se han ablandado.

6. Si ves que la compota se está quedando seca, puedes añadir más agua según la vaya necesitando.

7. Una vez lista, saca las pieles y remueve bien. Retira del fuego y espera a que temple un poco antes de servirla.

Si la vas a servir como postre puedes dejarla tal cual, con trozos. Para los bebés o personas mayores, mejor que la aplastes con un tenedor. En caso de prepararla para acompañar una carne, tienes que pasarla por la batidora.

Una vez que hayas aprendido a hacer la compota de manzana, puedes darle tu toque personal. Prueba a añadir zanahoria, pera o calabaza, por ejemplo. O a incorporarle unos frutos secos para que sea más nutritiva.

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