Leche de vaca: ¿sí o no?
Cada vez son más las personas que eliminan la leche de vaca de su dieta, ¿pero será un alimento perjudicial para nuestra salud? Descubre más aquí.
La leche de vaca ha perdido posiciones frente a las bebidas vegetales que en los últimos años han invadido los supermercados y los frigoríficos de numerosos hogares.
A más de uno esto le puede parecer contradictorio, ya que siempre se nos ha dicho que la leche tiene completas propiedades nutricionales y diversos beneficios para nuestro organismo.
Sin embargo, en los últimos años han ido surgiendo cada vez más detractores que afirman que la leche de vaca es perjudicial para la salud.
¿Hasta que punto son ciertas estás afirmaciones? ¿Se trata de un alimento tan saludable como siempre nos han hecho creer? A continuación analizamos los pros y los contras.
Pros y contras de la leche de vaca
Beneficios de la leche de vaca
No cabe duda de que la leche ofrece un completo aporte nutricional que incluye proteínas, hidratos de carbono, ácidos grasos, vitaminas del grupo A, B y C, y minerales como el fósforo y el calcio, que favorecen la salud ósea. Además, de su alto contenido en potasio y magnesio que ayuda a prevenir el riesgo cardiovascular.
Sin embargo, es cierto que las leches desnatadas y semidesnatadas, debido al proceso al que se ven sometidas, ofrecen un aporte más escaso de vitaminas. Es por eso que muchas marcas fabrican leches enriquecidas con vitaminas, calcio y omega-3.
Inconvenientes del consumo de leche
La principal polémica que ha surgido en los últimos entorno a la leche de vaca son los aditivos químicos que se utilizan en las explotaciones intensivas.
Sin embargo, administrar hormonas o antibióticos para fomentar el crecimiento está prohibido por ley, tan solo pueden usarse en situaciones puntuales y es necesario esperar para que el organismo del animal metabolice esas sustancias para que no supongan ningún riesgo para la salud de los consumidores.
Otro de los argumentos contra el consumo de leche es su alto contenido en grasas saturadas, sin embargo, el índice es solo del 3,6% en la leche entera, y en su versión desnatada no posee nada de grasa.
Eso sí, es cierto que los nutrientes que nos ofrece la leche de vaca podemos encontrarlos en otros alimentos. Por ejemplo, las legumbres y los frutos secos también son muy ricos en calcio, y además su absorción es mejor que la de la leche.
¿Debemos eliminar la leche de nuestra dieta?
Si no se padece ninguna alergia o intolerancia a la lactosa o a la proteína de la leche, desde el punto de vista nutricional, no sé tiene por qué eliminar por completo la leche de la dieta.
Pero si decides incluir leche de vaca en tu dieta, es importante que optes siempre por leche fresca de calidad. Una opción más saludable puede ser alternar su consumo con otras bebidas vegetales, por ejemplo, la leche de almendras o la leche de avena.
También existe la posibilidad de optar por la leche ecológica, pero ante cualquier duda lo mejor es consultar con tu médico.
Puede interesarte:
- ¿Todavía no has probado el queso quark? Descubre qué es y cuáles son sus beneficios
- Skyr: Conoce el superyogur que todos hablan
- 9 productos de Mercadona que no puedes perderte
- Proteínas: Todo lo que necesitas saber