Conoce los tipos de trastorno obsesivo compulsivo que existen
Los tipos de trastorno obsesivo compulsivo varían según sea el pensamiento de cada persona. Van desde una obsesión por los gérmenes a la repetición palabras.
El trastorno obsesivo compulsivo o TOC es una enfermedad mental que provoca que las personas que la sufren se obsesionen con un pensamiento y liberen la ansiedad que les provoca llevando a cabo rituales repetitivos. Dependiendo del comportamiento y del pensamiento, se dan diferentes tipos de trastorno obsesivo compulsivo.
Como podrás ver a continuación, estas obsesiones pueden estar relacionadas, entre otros, con el orden, la limpieza, la salud o el perfeccionismo. ¿Quieres conocer cuales son los TOC más comunes?
Tipos de trastorno obsesivo compulsivo
1. Lavadores y limpiadores
Las personas que sufren este TOC están obsesionadas con los gérmenes, la contaminación y/ o el contagio de enfermedades. Por ese motivo siempre usan guantes, utilizan grandes cantidades de desinfectante, se lavan las manos infinidad de veces, limpian la casa continuamente, evitan tocar cosas y personas, etc.
2. Verificadores
A estos pacientes les preocupa que pueda ocurrir un accidente. Es por ello que revisan decenas de veces el grifo del agua, los enchufes, las cerraduras, las llaves del gas, los electrodomésticos, los aparatos eléctricos y demás elementos que puedan entrañar algún peligro. Al salir de casi, siempre les entra la duda sobre si han cerrado bien la puerta, han apagado todas las luces o han dejado el horno encendido, por poner algunos ejemplos.
3. Repetitivos
Este tipo de TOC se caracteriza porque quienes lo sufren necesitan realizar varias veces el mismo comportamiento o repetir una misma palabra o frase.
4. Somáticos o hipocondríacos
En ocasiones se utiliza esta palabra a la ligera para hablar de alguien que se preocupa por su salud. Pero quienes realmente sufren hipocondría se obsesionan de tal manera con desarrollar una enfermedad que entran en pánico cuando tienen algún síntoma anormal. Continuamente están tomándose la temperatura, el pulso, la presión arterial, verificando que la frecuencia cardíaca es correcta, etc.
5. Ordenadores
El orden es una obsesión para las personas que sufren esta clase de TOC. Pero no les basta con tenerlo todo ordenado, sino que los objetos deben colocarse siguiendo unas determinadas pautas.
6. Acumuladores
No hay que confundir el TOC de acumulación con el Síndrome de Diógenes. Los primeros adquieren objetos insignificantes de forma compulsiva y luego no son capaces de deshacerse de ellos porque piensan que puede ocurrir una desgracia. Suele afectar a personas jóvenes que no tienen problemas físicos.
En cambio, el Síndrome de Diógenes suele darse en personas mayores que viven solas y que tienen problemas físicos. Normalmente va asociado a alguna enfermedad mental, como puede ser la demencia. Además de acumular, no se preocupan por la limpieza, cosa que no les produce malestar.
7. Perfeccionistas
Quienes lo sufren tienen la necesidad de ser los mejores en todo, así que su obsesión está encaminada a lograr la perfección. Estas personas son muy autoexigentes y críticas.
Otros tipos de trastorno obsesivo compulsivo
- Ritualizadores mentales. Para calmar la ansiedad que les provoca una idea, crean imágenes repetitivas en su cabeza.
- Supersticiosos. Creen firmemente que los actos o pensamientos negativos pueden dañar a otras personas. Como compensación, realizan rituales de forma compulsiva.
- Intolerantes a la incertidumbre. Siempre tienen que estar seguros de que sus acciones son las correctas. Por eso no toleran las ambigüedades o las situaciones inciertas.
- Numerales. Hacen todo tipo de cálculos para que los números adquieran un significado importante para ellos.
- Preguntadores. Siempre están haciendo preguntas sobre cualquier cosa, por insignificante que sea, tanto a sí mismos como a los demás.
- Obsesiones no clásicas. Hay otros tipos de comportamientos obsesivo compulsivos que no están incluidos dentro de los denominados como “clásicos”, pero conviene mencionarlos porque están ahí y son más frecuentes de lo que se piensa. Hablamos de las obsesiones por la contaminación, la salud, la apariencia física, sexualidad, las agresiones, la inteligencia o las obsesiones filosófico-religiosas, entre otras.
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