Ensalada de queso de cabra: ¿es recomendable en las dietas?
La ensalada de queso de cabra puede ser una gran aliada para ocasiones especiales. ¡Aprende a prepararla de manera saludable!
Por su valor nutricional, la ensalada de queso de cabra puede servirse como primer plato, y si bien no puede ser un habitual en nuestra dieta, es un plato que nos salvará en más de una ocasión si queremos sorprender a nuestros invitados con un plato delicioso y saludable.
Además, no necesitarás gastar mucho dinero en ingredientes, ni pasar horas en la cocina, y el resultado te hará quedar como un perfecto anfitrión.
¿Es recomendable el queso de cabra en las dietas?
Cuando estamos a dieta tenemos una especie de obsesión por controlar las grasas y las calorías. Aunque está claro que hay que mantener un equilibrio, lo cierto es que no podemos volvernos locos con las calorías, sino más bien elegir bien cuando darnos un capricho y, créeme, tienes que dártelo. Nadie vive en una dieta constante, por ello, intenta equilibrar tu alimentación para no pasar hambre ni darte atracones que arruinen todo.
Beneficios del queso de cabra
Siguiendo la línea anterior, el queso de cabra consumido con moderación puede ser una muy buena opción, principalmente si se come en ensalada como plato principal. Si aún te lo estás pensando, estos son algunos de los beneficios que este alimento puede aportarte.
- Tiene un rico contenido de nutrientes.
- Bajo nivel en sodio.
- Contiene probióticos.
- Tiene un efecto saciante.
Receta de ensalada de queso de cabra
Imagen: cocinaconmarta.com
Probablemente encontrarás muchas versiones distintas de ensalada de queso de cabra, nosotros te proponemos esta:
– Ingredientes –
- 4 rodajas de queso de cabra
- Un puñado de canónigos (puede ser una bolsa de las que encuentras en el supermercado)
- 10 nueces
- Mermelada de frambuesa
- Aceite de oliva virgen extra
- Vinagre de manzana
- Sal
– Preparación –
Para elaborar esta ensalada de queso lo primero que tendrás que hacer es cortar el queso de cabra las rodajas, puedes cortarlas con un dedo de grosor para que no se te parta.
Una vez cortadas, dóralas en una sartén por ambos lados. Si pones una gotita de aceite de oliva en la sartén evitarás que el queso se pegue.
Una vez el queso dorado, coloca los canónigos en un bol de ensaladas y aliñados con aceite de oliva, vinagre de manzana y sal.
Abre las nueces, córtalas y repártelas por los canónigos. Después, incorpora el queso, ¡y listo! Si lo deseas puedes decorar la ensalada con un poco de mermelada de frambuesa.
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