Conoce los problemas de aprendizaje más comunes y cómo afrontarlos
El 10% de los escolares tiene problemas de aprendizaje. La dislexia, disgrafía, disortografía y discalculia son los más comunes.
¿A tu hijo le cuesta seguir el ritmo de la clase? Tranquila, que no es el único. Se calcula que al menos uno de cada 10 escolares tiene problemas de aprendizaje. ¿Qué quiere decir esto? Básicamente, que su cerebro procesa la información que recibe de una forma diferente.
Siempre ha habido niños con dificultades específicas de aprendizaje (DEA), una de las principales causas del fracaso escolar. Pero hoy en día los expertos conocen mejor el funcionamiento del cerebro.
Gracias a los avances, es posible identificarlas a tiempo e incluso ayudar a los niños a superarlas. Los profesores saben que deben adaptarse al ritmo de aprendizaje de sus alumnos en función de sus necesidades específicas.
Los 6 tipos de problemas de aprendizaje más frecuentes
¿Cuáles son las DEA más comunes entre los estudiantes? Las que afectan a la lectura, la escritura y las matemáticas.
Dislexia
Es la más conocida. Consiste en la dificultad para leer y escribir. Los niños tienen problemas para asociar el fonema con la letra que le corresponde. Esto también afecta a la capacidad para recordar las normas ortográficas.
Disgrafía
Quienes la sufren, tienen problemas para escribir las letras. Esta puede ser de dos clases:
- Disgrafía motriz: los niños pronuncian bien los sonidos y los entienden, pero a la hora de escribirlos en el papel apenas se entienden por un problema de motricidad.
- Disgrafía específica: la mala escritura es consecuencia de una desorientación espacial y de la percepción errónea de las formas.
Quienes tienen disgrafía, suelen tener también problemas para deletrear las palabras.
TANV
Todavía no se sabe mucho sobre el trastorno de aprendizaje no verbal. No está muy claro por qué tienen problemas para interpretar la información no verbal, para relacionarse y comunicarse con los demás.
Disortografía
Afecta a la escritura. Debido a que los niños tienen dificultad para deletrear las palabras, cambian de orden las letras, escriben varias palabras seguidas o la representan igual que las pronuncian.
Los dictados y copias de textos sirven para detectar esta clase de problemas de aprendizaje.
TEL
Las estadísticas revelan que en torno al 7 u 8% de los escolares tienen trastornos del lenguaje. Se expresan correctamente y se hacen entender, pero tienen dificultad para comprender lo que les dicen o lo que leen.
Discalculia
Afecta al 1% de la población infantil y se caracteriza por la dificultad para conseguir procesar los números y hacer cálculos. Ya se empieza a notar con las operaciones matemáticas básicas. Un síntoma es cambiar de orden los números (poner 42 en lugar de 24, por ejemplo).
¿El TDH también está entre los problemas de aprendizaje?
El trastorno por déficit de atención e hiperactividad no es un problema de aprendizaje en sí mismo. De hecho, muchos niños no necesitan un profesor de apoyo. Su bajo rendimiento académico viene motivado porque se distraen con facilidad. Es importante que en el colegio estén al tanto de la situación para que sus maestros lo tengan en cuenta.
Cómo tratar los problemas de aprendizaje
Los padres y los profesores son los que nos damos cuenta si los niños tienen dificultades específicas de aprendizaje. Por eso es importante que, nada más que tengamos sospechas, acudamos a un psicólogo o especialista en aprendizaje para que haga la valoración y aconseje las medidas a seguir.
Para detectar los trastornos de aprendizaje, debemos estar atento a los síntomas. Algunos de los más significativos son los siguientes:
- El niño no es capaz de seguir instrucciones o de entender lo que se le dice;
- Sus habilidades de escritura, lectura, matemáticas u ortografía no se corresponden con las que debería tener por edad o curso;
- No recuerda algo que le acabas de decir;
- No es capaz de sostener un lápiz;
- Le falta coordinación no solo para practicar deporte, sino también para caminar;
- No sabe dónde ha puesto sus deberes o sus cosas;
- Le cuesta entender el concepto de tiempo;
- Cuando tiene que hacer los deberes, sobre todo si son de lengua o matemáticas, se niega;
- No quiere ir al colegio.
Normalmente, los niños con problemas de aprendizaje no necesitan ir a clases de educación especial. Solo necesitan apoyo y seguir las pautas marcadas para practicar sus habilidades.
Si bien es cierto que estas limitaciones no tienen cura, sí que existen tratamientos que ofrecen mejoras significativas.
El tratamiento implica varios pasos, entre los que se incluyen: terapias conductuales y psicosociales (capacitación de destrezas sociales, modificación del comportamiento, terapia cognitiva conductual, psicoterapia, etc), refuerzo psicopedagógico, seguimiento psicológico, coordinación con el centro escolar y asesoramiento familiar.
En algunos casos es necesario recurrir a los medicamentos. No te asustes, porque hoy en día la medicación está muy controlada.